La ganadora como Mejor Actriz Principal de Miniserie por su papel en Big little lies despertó gritos, silbidos y aplausos de los presentes cuando le agarró la cara a Alexander Skarsgård y le 'estampó' el rouge en sus labios por su estatuilla como Mejor Actor Secundario. ¿El detalle más importante? Su esposo, el músico neozelandés y ex jurado de American Idol, Keith Urban estaba viento todo en primera fila.
Al recibir su premio, Kidman se emocionó: "Soy madre y soy esposa. Tengo dos niñas, Sunny y Faith, y mi querido Keith, a quienes les pido que me ayuden a seguir en este camino artístico, lo que les supone mucho sacrificio.
Así que esto es de ustedes. Quiero que mis hijas tengan esto en la estantería y que lo miren y piensen: "cada vez que mi madre no me metió en la cama, es por algo". Quiero que ellas sepan que a veces, cuando estás actuando, tienes la oportunidad de dar un mensaje importante.
Hemos puesto el foco en la violencia doméstica. Es una enfermedad complicada e insidiosa. Está mucho más presente de lo que nos permitimos saber. Está llena de vergüenza y secretismo y al reconocerme con este premio, el foco brilla aún más. Asi que, gracias, gracias. Me inclino ante ustedes".
"Hemos puesto el foco en la violencia doméstica".
— El Español (@elespanolcom) 18 de septiembre de 2017
El valiente mensaje de Nicole Kidman en la gala de los Emmy pic.twitter.com/m4Snaf532S
Como de costumbre, el presidente de los Estados Unidos estuvo presente en la ceremonia. Al menos, su nombre. El conductor Stephen Colbert disparó contra Trump: "Si hubiera ganado un Emmy no se habría presentado a la Presidencia. Yo pensé que a ustedes les gustaban los antihéroes con compromiso moral y nunca se los perdonó ni se los va a perdonar".
Pero antes, Colbert lo desafió:"Hola Señor. Muchas gracias por mirarnos. Esperamos los tweets".
Kevin Spacey se coronó tristemente como el nuevo DiCaprio de los Emmy. Es que el ‘House of cards’ aún no sabe lo que es ganar uno pese a estar nominado por quinto año consecutivo para hacerse con el premio de mejor actor de serie dramática, pero el distintivo fue a parar a Sterling K. Brown (‘This is us’) y Spacey se quedó fuera de la lista de ganadores.
